Conductor pisa el acelerador e invade desfile e intenta huir

Un conductor ingresó al desfile del 20 de noviembre y provocó alarma al intentar huir.

Un hecho inesperado generó alarma durante el desfile conmemorativo del 20 de noviembre en Ciudad Madero, cuando un conductor ingresó sin autorización a la zona delimitada para el contingente oficial.

El sujeto irrumpió en plena marcha, interrumpiendo el avance y alterando el ambiente que hasta ese momento se mantenía en orden.

 

De acuerdo con testigos, el individuo condujo su vehículo de forma temeraria, pasando a escasos centímetros de estudiantes de primaria y de un agente de Tránsito que resguardaba el área.

La acción puso en riesgo a menores y asistentes, provocando indignación entre los presentes.

 

¿Qué ocurrió durante el desfile en Ciudad Madero?

 

El automovilista no solo desobedeció las indicaciones de las autoridades, sino que adoptó una actitud desafiante. Incluso intentó ofrecer dinero a los oficiales para evitar consecuencias, lo que incrementó la molestia de quienes presenciaban el acto cívico.

 

En su intento por evadir el cierre vial, el hombre estuvo a punto de arrollar a un elemento de Tránsito que le marcó el alto. Fue hasta varios metros adelante cuando finalmente se detuvo, momento en el que agentes viales procedieron a bajarlo del vehículo.

 

La intervención conjunta de autoridades y ciudadanos permitió que el sujeto fuera detenido de inmediato.

 

Consecuencias legales y administrativas para el conductor

 

El comportamiento del automovilista podría derivar en sanciones administrativas, penales y civiles, dependiendo de la gravedad que determinen las autoridades competentes.

 

* •Consecuencias administrativas: No respetar señalamientos viales durante un desfile puede derivar en multas, aseguramiento del vehículo y arresto por faltas al reglamento. Además, la autoridad puede suspender o retirar la licencia del conductor, especialmente cuando la falta pone en riesgo a participantes y asistentes en un evento oficial.

* •Consecuencias penales: El intento de arrollar a un agente de Tránsito y poner en riesgo la integridad de menores podría configurarse como delitos contra la seguridad pública y resistencia a la autoridad.

* •Consecuencias civiles: Los daños materiales o afectaciones a terceros durante el incidente también podrían generar responsabilidades económicas para el conductor.

 

Con información de Excélsior.

 


 

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